Crítica - Liga de la Justicia

En la dirección de lo "políticamente correcto"


Título original: Justice League

Sinopsis:

     Bruce Wayne y Diana Prince unen esfuerzos para formar un equipo conformado por seres especiales, con el fin de proteger a un mundo atemorizado y vulnerable luego de la muerte de Superman; justo cuando aparece Steppenwolf, un ser maligno que desea encontrar las tres Cajas Madres y así, destruir la Tierra.

Reparto:

Ben Affleck con Bruce Wayne/Batman
Gal Gadot como Diana Prince/Mujer Maravilla
Ezra Miller como Barry Allen/Flash
Ray Fisher como Victor Stone/Cyborg
Jason Momoa como Arthur Curry/Aquaman
Ciarán Hinds como Steppenwolf
Henry Cavill como Clark Kent/Superman
Amy Adams como Lois Lane
Diane Lane como Martha Kent

Análisis e impresión:

     Muchísima expectativa había hacia el primer largometraje del equipo estrella de superhéroes de DC Comics, el cual forma parte de su nuevo universo cinematográfico. Un arco narrativo, que con ésta, lleva cinco películas, y el cual, desde sus inicios, no ha contado con una amplia aceptación, siendo la única excepción la genial cinta de la Mujer Maravilla. Si algo diferenciaba a las películas de DC (parte de la mega corporación Warner), de las de la competencia (específicamente Marvel y Fox), era el tono más cercano, serio, humano y realista, más acorde a cómo es el mundo, y no cómo soñamos que fuese. Por ejemplo ¿realmente aceptaríamos así como así a un alienígena todopoderoso, con el poder de hacer el bien, pero también de destruirnos?. Ese mismo enfoque fue el que empleó Christopher Nolan, el niño mimado de Hollywood, para hacer su muy buena trilogía de Batman, y luego de ésto, tenía el mundo a sus pies. Llegó Zack Snyder, un director de la casa y fanático de los cómics, y quiso hacer lo mismo con el héroe del planeta Kriptón: hacerlo persona, humano y "vulnerable" en ese contexto; que fuera ganando madurez y experiencia a medida que vivía en un mundo que no es perfecto, pero que siempre representaría la luz y la esperanza para la humanidad. Sucedió que, en el 2013, se estrenó El Hombre de Acero, y polarizó a los críticos, precisamente por ese enfoque más realista y cercano dado, como si eso fuera un crimen. Llegó el año pasado Batman v Superman, donde afloraba aún más el lado oscuro de todos los seres que habitan en la Tierra, incluyendo Superman; y ahí si que la mayoría de la gente no tuvo piedad en hacerla pedazos. No les gustaba el tono realista y humano que tenían las películas, y pedían algo más como lo que hacía la llamada "casa de las ideas": un mero entretenimiento sin profundidad ni delicadeza en cuanto a su trama y construcción y empatía de personajes. Y como la naturaleza humana es una cosa seria, para ganarse el beneplácito de todo el mundo, Warner/DC le cortó las alas a Snyder, y buscó alterar el rumbo que venían teniendo sus cintas. De ser más humanas, profundas y realistas, están pasando a ser más fáciles, relajadas, potables, y menos delicada en cuanto al desarrollo de la historia y personajes. Esto de ser "políticamente correcto" fue, justamente, lo que empezó con Liga de la Justicia.



     Voy al grano con la película. Es triste lo que me pasó con ella porque, recién salido de la sala de verla, me gustó bastante. Es una muy buena historia, bien contada, personajes -en su mayoría- bien elaborados, y claro, visualmente espectacular. Sin embargo, conforme pasaron los días, más y más cosas me fueron haciendo ruido y, lamentablemente, su puntuación fue cayendo considerablemente. Lo que la hundió fue que, como escribí anteriormente, Warner le cortó las alas brutalmente al director de Wisconsin. Por todo el rollo de que se demandaba un tono más ligero y "luminoso", una vez terminado el film, Snyder se los enseñó a los directivos del estudio, y éstos le dijeron que hiciera unas regrabaciones, y fue cuando se trajo a Joss Wheadon para que re-escribiera ciertas partes del guión; posteriormente, fue cuando Snyder tuvo que retirarse de la post-producción, y Wheadon quedó como el amo y señor de la película. El resultado fue un choque de estilos, porque, mientras por escasos momentos tenemos el estilo profundo y serio de Snyder, por muchos otros tenemos el estilo relajado y más superficial de Wheadon. No es que el estilo de Wheadon sea malo, pero aquí sí choca porque no es el enfoque que venían teniendo las películas de DC, y que, por oír a unos cuantos comeflores, se está perdiendo. Una muestra de ésto es Superman, que pasó de ser alguien con emociones, y que maduraba a medida que se vivía en un mundo con contrastes, a alguien que es puras sonrisas -y alguno que otro chiste insulso-. Otra cosa es que Wheadon apeló a la nostalgia de la gente y les "regaló" guiños a las antiguas películas de Batman y Superman. Warner/DC se está comenzando a vender a lo que las demás personas quieren, aunque sea imitar a su competencia, en lugar de continuar forjándose una identidad propia. Muy, muy mal. Y claro, que el metraje sea solamente de 2 horas es otro claro signo de la alteración de la visión de Snyder, un director que siempre proyecta sus películas para que duren cerca las 3 horas o más. Sabiendo la orientación de los previos filmes de Snyder con DC, y todo lo que el mismo director a confirmado sobre cómo tenía pensado hacer su cinta, uno no puede dejar de sentir que esta versión de Liga de la Justicia estrenada en cines es muy, muy inferior comparada al producto que Snyder tenía en mente y, de hecho, filmó. Tal vez gustara más y hubiera funcionado si fuera algo independiente y sin relación con las cintas previas. Triste, pero cierto. Ojalá, algún día, se pueda lanzar el corte con la visión de Snyder (bautizado ya como Snyder Cut), la única y verdadera, y que nunca debió ser ni cortada ni cambiada. Seguramente, sería una cinta perfecta.



     Los personajes están, en su mayoría bien. Batman y la Mujer Maravilla excelentes. De los "nuevos", para mí, el mejor fue Cyborg, con una historia interesante y es la mejor elaborada. Aquaman, bien, pero no destaca. Y Flash, bien, aunque me pareció ligeramente cargante y algo desentonado. Una cosa que me molestó muchísimo fue lo que le hicieron a Superman, tal como lo mencioné anteriormente, y sobre todo, porque SPOILER la escena de su resurrección discrepa por completo con el final de Batman v Superman FIN SPOILER. Han vapuleado al villano, Steppenwolf, diciendo que es pobre, sin carisma, y con poco tiempo en pantalla. A mí no me lo parece. Tiene personalidad, tiempo en pantalla, y cumple bastante bien su rol. Claro, para una película en la que todo fue alterado de la manera tan vil que lo fue, cumple. No es por comparar, pero por ahí han habido villanos peores (léase Zemo o Yellowjacket, por ejemplo), y nadie dice nada.

     Y DC esta vez puso 2 escenas post-créditos. La primera, con Superman y Flash, un asco. Ridícula. Pero la segunda, mucho mejor, donde se unen dos villanos emblemáticos, y se augura algo que, esperemos, sea muy importante.



     La banda sonora es otro tema de discusión. El Maestro Hans Zimmer había declinado seguir trabajando en el cine de superhéroes (más de un imbécil le echó la culpa a Zack Snyder), pero dejó a su pupilo Junkie XL, quien había hecho un excelente trabajo junto a él en el film del año pasado, encargado para que hiciera lo correspondiente para esta película. Sin embargo, tras la re-estructuración que hubo este año, Junkie XL fue apartado del proyecto, y decidieron traer a Danny Elfman, quien compuso un score especialmente para los nostálgicos, además de muy fanfarrioso. Aunque alguno que otro acorde suena bien, marca un retroceso totalmente innecesario y no concuerda con el  estilo de estas películas. Lo único rescatable es la versión de Everybody Knows por la cantante noruega Sigrid, y que va de la mano excelentemente con ese inicio genial, que afortunadamente, es de los momentos que tiene el sello Snyder.

     En resumen, Liga de la Justicia es buena, pero sólo si se ve desde una difícil perspectiva en la que es una película sola, sin precuelas y que no forma parte de un universo en el que todo es consistente y está conectado. Lamentablemente, si se ve toda la imagen, todos los problemas de producción, la falta de personalidad de Warner en sostener la saga que estaban creando, y el gran proyecto que tenía Zack Snyder en mente y lo que pudo haber sido; tristemente nos queda un producto que roza lo aceptable sólo porque entretiene, pero que es sumamente mediocre y una gran decepción para todos los que queríamos seguir viendo un estilo diferente de cine de superhéroes. Y desde acá también me uno a la campaña #ReleaseTheSnyderCut.


Lo bueno de la película: Los pocos momentos marca Snyder.

Lo malo de la película: Toda su cruel alteración, cortesía de Warner y Joss Wheadon, en especial la "reinvención" e inconsistencias que rodean al personaje de Superman, y su fanfarriosa, nostálgica y sin identidad banda sonora. 

Puntuación final: 5/10     ★★★★1/2

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